Mandre Beach

La playa de Mandre es una pintoresca zona costera situada en la parte sur de la isla de Pag, un popular destino turístico. La playa se encuentra en la localidad de Mandre, aproximadamente a cuatro kilómetros de la marina ACI Šimuni y a unos diez kilómetros de la playa de Zrće. La ubicación ofrece impresionantes vistas de las cercanas islas de Silba, Olib, Maun y Škrda, que contribuyen al encanto y atractivo general del lugar.

El entorno natural de la playa de Mandre se caracteriza por sus aguas azules cristalinas y sus orillas arenosas, rodeadas de diversa vegetación mediterránea, que incluye hierbas aromáticas, salvia e immortelle. El paisaje también está marcado por la torre blanca de la iglesia Gospe Snježne, que añade un toque único al paisaje general. La playa está compuesta principalmente por piedras de guijarro únicas, lo que la hace adecuada para niños y personas con discapacidades.

Una de las características destacadas de la playa de Mandre es su atmósfera tranquila y no masificada. A diferencia de muchos otros destinos de playa populares, la playa de Mandre ofrece un ambiente sereno para los visitantes, lo que la convierte en un lugar ideal para una escapada relajante. La playa también cuenta con un puerto bien protegido conocido como Porat, rodeado de bosques de pinos y protegido de tormentas, ofreciendo un lugar seguro y tranquilo para los navegantes.

En cuanto a servicios, la playa de Mandre ofrece una variedad de opciones para los visitantes. Hay instalaciones deportivas disponibles en el complejo turístico Mandrice para los huéspedes activos, y una pequeña playa llena de actividades específicamente diseñadas para niños. Restaurantes y cafés también están alineados a lo largo de la costa, ofreciendo una variedad de opciones gastronómicas para los visitantes.

Para llegar a la playa de Mandre, los visitantes pueden tomar un pequeño barco o kayak desde las islas vecinas deshabitadas de Maun y Škrda. También hay excursiones organizadas diariamente a las islas de Silba y Olib, así como a los parques nacionales Kornati y Plitvička jezera, brindando oportunidades para que los visitantes exploren la naturaleza virgen.