La Playa de Vallina es una playa apartada en el municipio de Cudillero, ubicada específicamente en la zona de Oviñana (Valdredo). Esta pintoresca playa es reconocida por su belleza natural, ofreciendo una mezcla armoniosa de mar, arroyos, pequeñas cascadas y rocas erosionadas. La playa se extiende a lo largo de aproximadamente 1 kilómetro, aunque no es excesivamente ancha. Está compuesta principalmente de arena de color claro intercalada con guijarros de diversos tamaños, lo que puede hacerla un poco incómoda para algunos visitantes.
El camino hacia la playa comienza con un desvío desde la carretera N-632 que lleva a Oviñana. Antes de llegar a la iglesia local, hay un giro a la izquierda que te lleva a un pequeño claro. Desde este punto, un camino de tierra conduce directamente a la playa. El recorrido hacia la playa desde este lugar se puede completar con una caminata de 15 minutos. Sin embargo, el camino no está pavimentado, es estrecho y con pendiente, lo que puede no ser adecuado para todos los vehículos.
No hay estacionamiento disponible directamente en la playa. Se aconseja a los visitantes dejar sus coches en el pueblo o en el área de estacionamiento designada en la carretera antes de llegar al camino. Esta área de estacionamiento puede acomodar alrededor de 6-7 coches. Alternativamente, hay otra área de estacionamiento que puede albergar unos 10 coches.
La Playa de Vallina está delimitada por el río Vivigo y está adornada con dos molinos restaurados del siglo XVIII situados junto a un arroyo. También hay un pequeño puente de madera cerca de los molinos, añadiendo al encanto rústico de la zona. Se pueden ver pequeñas cascadas, incluso en verano, y hermosas rocas erosionadas son visibles en el lado oeste de la playa.
A pesar de estar algo remota, la Playa de Vallina es perfecta para largas caminatas, con bosques de eucaliptos flanqueando el camino que lleva a la playa. Sin embargo, se aconseja a los visitantes tener precaución ya que el mar a veces puede ser peligroso y la playa carece de ciertas comodidades como fuentes, duchas y baños. No obstante, la combinación única de playa y naturaleza que ofrece la Playa de Vallina la convierte en un destino que vale la pena para aquellos que buscan una experiencia de playa tranquila y escénica.
Los servicios de Playa de Vallina incluyen estacionamiento.
Las reseñas de los visitantes destacan la belleza natural de la playa, con su mezcla de mar, arroyos, pequeñas cascadas y rocas erosionadas. El tamaño de la playa, ideal para largos paseos, y la presencia de antiguos molinos añaden encanto. Sin embargo, los visitantes se quejan de las incómodas piedras pequeñas en gran parte de la playa, el mar potencialmente peligroso, la falta de servicios de playa y su distancia de los centros urbanos.
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